miércoles, 3 de junio de 2009

CIEGOS DE AMOR


El delirio, la impaciencia, la efervescencia de los labios, la turbulencia
de los cuerpos;
el calor de tu sexo, ardiente y complaciente a mi intima violencia…, tu sabor, tu mirada;
el placer que nubla la conciencia, se repite inagotable, encendido;
y después exhaustos, la confidencia, la sonrisa y la mano tendida que acaricia, buscando tu existencia.